Reseña-->Parasyte.

Holaa, ¡aquí KitayuD! ^^/

Hoy os traigo la reseña de Parasyte, una serie ya entrada en años, pero cuyo anime salió hace relativamente poco (2014).

Episodios: 24.
Género: Ciencia ficción, horror, drama.
Estudio: Madhouse.
Director: Kenichi Shimizu
Guión: Shoji Yonemura
Música: Ken Arai.
Creador: Hitoshi Iwaaki.
Argumento: Unos seres que caen del cielo buscan introducirse en cuerpos humanos para infectarlos y tomar el control del cuerpo de éstos, incluída su mente. El problema es que uno de ellos no ha conseguido tomar el cerebro de Sinichi, un adolescente de 17 años, sino su brazo, y ahora ambos serán el centro de atención de los demás parásitos, que viven ocultos en la sociedad como ciudadanos normales y sin embargo se alimentan de humanos... ¿conseguirán Sinichi y su parásito Migi mantenerse con vida y acabar con el resto de los parásitos?



Mi opinión:

"¿Qué es la humanidad?" Y de ahí surge un manantial de posibilidades como respuesta.

Parasyte es un anime que se alza sobre los demás por su actualidad. Poco importa que sea un manga publicado hace casi treinta años, si los mensajes y preguntas que lanza son necesarios, recurrentes y polémicos en nuestro tiempo. Parasyte es uno de esos animes, que no envejecen.

Si bien es cierto, como tengo entendido, que el anime actualiza ciertas cosas, como el vestuario o que algunas escenas son distintas, es bastante fiel al manga, por lo que sus lectores quedarán satisfechos.

El guión de Parasyte es complejo y enrevesado, pero al final resulta eficaz. Comparando impresiones con algunos amigos, he llegado a la conclusión de que si lo que te gusta es la historia, con un guión potente y el planteamiento de ciertas preguntas que harán temblar los cimientos de tus principios, el principio y final de la serie son lo que estás buscando. La serie empieza con una idea original y bien hecha, en la que los acontecimientos pasarán a toda velocidad con un objetivo claro, al igual que al final de la historia. Mucha acción, muchos momentos "nononono, no jodas...", muchos descubrimiento sorprendentes, el planteamiento de preguntas que te harán pensar y la respuesta que da el autor a las mismas.

Sin embargo, ahora viene mi grupo, o al menos lo que yo veo como mejor de la historia. Para mí, el punto álgido de la serie llegó con la mitad de la misma y terminó con el inicio del tramo final. Lo importante de esta serie es Sinichi, el personaje principal, y su rotundo y repentino desarrollo. El quid de la cuestión no es el planteamiento de qué es la humanidad o la respuesta a ésta pregunta, sino cómo Sinichi decide enfocar la cuestión y enfrentarse a ella para encontrar una respuesta. No es el qué, sino el cómo, que por sí sólo responde al qué.

Dicho esto, también es cierto que ésta parte de la historia es mucho más lenta y tampoco tiene un enfoque claro. Aparecen personajes que sólo son puentes y no tienen un verdadero peso narrativo, no hay acción clara... más bien parece un Slice of life de un grupo de personas con serios problemas psicológicos, pero de eso ya hablaremos más adelante. 

Precisamente porque la serie es en realidad una especie de ensayo en el que se trata de responder a la pregunta ¿Qué somos, adónde vamos?, el guión en parte falla. No sólo por la falta de desarrollo de muchos personajes, que simplemente se quedan como unos muñecotes que acompañan al protagonista, sino que algunos acontecimientos no tienen demasiado sentido y muchas cosas dentro de la trama quedan abiertas de forma que piensas: Ok... pero esto, ¿qué?.

Los personajes de los que realmente podemos hablar son tres, Sinichi, Migi y la profesora, que sufrirán un desarrollo muy importante y en los que veremos cómo se influyen unos a otros hasta llegar a un desenlace. Sinichi es sin duda el mejor personaje de la serie en cuanto a complejidad. Migi es extraño, su racionalidad máxima hace de él algo simple y complejo a la vez, y es el que lanzará los mensajes que te atravesarán como agujas. La profesora es sin duda el más misterioso e interesante, siendo la representación de la evolución de los parásitos. Luego podríamos hablar de semi-personas como Murano o Kana, que son el tipo de personaje pelele y estúpido del que hablé antes, y al que si fueses Sinichi querrías arrancarles la cabeza. La relación de Murano tiene sentido y es necesaria ya que es lo que ata a Sinichi a sus principios, pero podrían haber hecho a un personaje menos insulso y pesado, por dios. Kana, bueno, digamos que le da igual hasta al protagonista. Lo único que todos los personajes tienen en común son apegos emocionales y problemas psicológicos graves, desde psicopatía hasta síndrome de estocolmo.

Técnicamente la serie está cuidada, la animación es de muy buena calidad, como acostumbra en general Madhouse, la paleta de colores es fría acompañando al ambiente tenso y desasogante de la serie, las escenas gore están bien hechas, el dibujo es nítido y recuerda a los mangas más clásicos (evidentemente), y la música me ha gustado especialmente, con su tema principal "Next to you", que por lo menos a mí me revolvía el estómago.


Para resumir, si quieres una serie que te mantenga en suspenso, con su tono creepy, acción, magníficos personajes, gore, misterio y que te haga replantearte muchas de las cosas que crees "claras", ésta es una serie que te puede gustar mucho. Francamente, creo que es difícil que no lo haga.

Un saludo, Kitayu! ^^/